Mark Uyeda, comisario republicano, ha sido nombrado presidente en funciones de la Comisión del Mercado de Valores de Estados Unidos (SEC) tras la marcha de Gary Gensler el 20 de enero.
Este cambio de liderazgo coincide con el segundo mandato del presidente Donald Trump y podría señalar un cambio transformador en la forma en que la SEC aborda la regulación de la criptomoneda.

Uyeda, conocido por su postura a favor de las criptomonedas, interviene en un momento en que el sector se enfrenta a años de directrices poco claras y una aplicación agresiva.
Un defensor del cripto dirige la SEC
El nombramiento de Mark Uyeda se produce en el marco de transiciones de liderazgo más amplias dentro de las agencias federales estadounidenses.
Uyeda ha criticado abiertamente el enfoque de la SEC bajo Gensler, que describió como un “desastre” durante una entrevista con Fox Business en octubre de 2023.
Argumentó que la confianza de la SEC en la “regulación a través de la aplicación” no había proporcionado la claridad que tanto necesitaba el sector de los activos digitales, dejando que los tribunales interpretaran sentencias contradictorias.
El nombramiento por el presidente Trump de Paul Atkins como presidente permanente de la SEC se alinea aún más con una visión reguladora pro cripto.
Atkins, ex comisionado de la SEC conocido por sus políticas favorables al mercado, está a la espera de la confirmación del Senado, sin que se haya facilitado un calendario claro.
Caso Ripple: ¿Aliviará el liderazgo de Uyeda la batalla legal?
La actual batalla legal de Ripple con la SEC sobre si XRP constituye un valor ha definido gran parte del discurso regulador de las criptomonedas.
Presentada en diciembre de 2020, la demanda acusa a Ripple de realizar ofertas de valores no registradas, una afirmación que Ripple refuta.
Bajo Gensler, la SEC persiguió agresivamente el caso, intensificando la incertidumbre para los tenedores de XRP y el mercado de criptomonedas en general. Sin embargo, el liderazgo interino de Uyeda puede introducir un cambio.
Anteriormente ha señalado que la SEC podría alejarse de la aplicación agresiva de la ley en los casos de no fraude, dando prioridad potencialmente a la orientación y la colaboración frente a las medidas punitivas.
Éste podría ser un momento crucial para Ripple. Un enfoque regulador más comedido podría abrir las puertas a una resolución que no sólo beneficiaría a Ripple, sino que también sentaría precedentes sobre cómo se tratan otros activos digitales.
Cambios normativos más amplios
El nombramiento de Caroline Pham como presidenta en funciones de la Comisión de Comercio de Futuros de Materias Primas (CFTC) complementa el nuevo cargo de Uyeda.
Pham, un defensor de los marcos reguladores favorables a la innovación, apoya los “cajones de arena reguladores” que permiten a las criptoempresas experimentar bajo una supervisión limitada.
Esto concuerda con el enfoque histórico de la CFTC de fomentar la innovación al tiempo que garantiza la protección del consumidor.
Los cambios en la dirección de la SEC y la CFTC se producen en medio de la agenda política pro criptografía del presidente Trump.
Trump ha insinuado elevar la criptomoneda a prioridad política, incluyendo posibles órdenes ejecutivas destinadas a fomentar el crecimiento y la colaboración del sector.
¿Qué es lo próximo para Ripple y XRP?
El XRP de Ripple ha soportado años de limbo legal, y el liderazgo de Uyeda aporta un rayo de esperanza para una resolución.
Aunque el mandato de Uyeda es provisional, representa un giro hacia un marco regulador más transparente y constructivo.
El caso de Ripple, que se ha convertido en un símbolo de los retos normativos a los que se enfrenta el sector de las criptomonedas, puede ver ahora un impulso renovado hacia la claridad y la equidad.
Por ahora, la postura favorable a las criptomonedas de Uyeda ofrece un rayo de optimismo para Ripple, XRP y el ecosistema de activos digitales en general.